Un grupo de adolescentes  realizan ayuda humanitaria en Arizona al recaudar mas de  10 000 artículos de higiene para personas sin hogar.

“Nunca imaginé que obtendríamos tanto como lo hicimos”, dijo Todd Applegate, de 18 años, quien recientemente fue llamado a la Misión Francia París y comenzó sus estudios en el Centro de Capacitación Misional en casa esta semana. Todd junto con sus vecinos y miembros de su barrio lograron recaudar en total 10 773 artículos en beneficio de AZCEND (en inglés), una organización sin fines de lucro en su área. Reunieron pastas de dientes, cepillos de dientes, champús, acondicionadores, peines, cepillos, desodorantes, jabones y más.

Por medio de la plataforma SirveAhora.org -que conecta a los voluntarios con oportunidades de servicio — los jóvenes de la Estaca Chandler Oeste, Arizona, dirigieron una campaña de 30 días antes de la Navidad de 2021. Y esas donaciones, además de las lecciones aprendidas, siguen bendiciendo vidas hoy. AZCEND pudo dar muchas de las donaciones a la ciudad de Chandler para un remolque de duchas portátiles. Y Applegate dijo que sabe que lo que aprendió de la campaña de donación lo ayudará en su misión.

“No solo estaba sirviendo, sino que me puse una meta y dediqué mucho tiempo y esfuerzo para superar esa meta”, dijo. “Me di cuenta de que no debía confiar en mí mismo, sino en el Señor y Su plan”.

El consejo de líderes de jóvenes de estaca ayudó a intercambiar ideas sobre formas de organizar la campaña de donación e involucrar a los miembros de la comunidad, las escuelas y las empresas locales.

Por ejemplo, algunas de las jóvenes querían ir juntas a cantar villancicos navideños. Decidieron ir en grupo a la casa de cualquiera que hiciera una donación y cantarles cuando recogieran los artículos, dijo Robin Finlinson, especialista de SirveAhora para el área de Chandler.Finlinson dijo que las jóvenes pidieron a otros miembros de la Iglesia que se lo dijeran a sus vecinos, y varios de esos vecinos estaban felices de recibir una serenata y participar en el servicio. También dijeron que estaban contentos de conocer SirveAhora.

Finlinson siguió la invitación de los jóvenes de su barrio de invitar a sus vecinos. “Invitar a los vecinos a servir con nosotros es una forma muy efectiva y divertida de fomentar la armonía dondequiera que vivamos”, dijo. “Y los efectos a veces son de mayor alcance de lo que imaginamos”. Una de las vecinas de Finlinson y su hija asisten con frecuencia a organizaciones locales sin fines de lucro. Pero las dos estudiantes de intercambio de 17 años que estaban recibiendo en ese momento, de Noruega y los Países Bajos, no estaban tan familiarizadas con esa cultura de servicio. “Estaban emocionadas por la oportunidad de participar” en la campaña de donación, dijo.

“Fueron testigos de primera mano de una generosa ofrenda voluntaria y aprendieron lo que se siente ser voluntario. Desde entonces han regresado a sus países de origen con ese conocimiento”, dijo Finlinson.Otros jóvenes utilizaron diferentes formas de involucrar a la comunidad e invitaron a empresas. Una práctica de odontología donó muchos artículos de higiene dental, por ejemplo.

Applegate y su copresidenta Talia Green, de 17 años, les contaron a sus compañeros de clase en la escuela sobre la campaña de donación. Applegate presentó la idea en una reunión general de la Sociedad Nacional de Honor.

“No esperaba que los estudiantes fueran tan generosos, pero cuando llegué a recoger los artículos, se estaban cayendo del mostrador en la sala del supervisor de la Sociedad Nacional de Honor. Hicieron falta varias cargas para llevarlos a mi auto”, dijo. Aproximadamente la mitad de los 2558 artículos que él y Green recolectaron procedían de la escuela.

Ayuda humanitaria: siempre suma y cuenta mucho

Los miembros de la estaca donaron dinero y Applegate y Green fueron a la tienda a comprar más artículos de higiene. Applegate dijo que otra compradora notó su carrito de compras y les preguntó al respecto. Luego abrió su billetera y les dio todo el efectivo que tenía para que compraran más.

“En ese momento, me di cuenta del impacto que puede tener hacer el bien. Es contagioso. La gente quiere hacer el bien, solo necesita saber dónde buscar”, dijo Applegate.

Green y otra joven de la Estaca Chandler Oeste, Emily Chase, de 17 años, dijeron que aprendieron que las personas están dispuestas a ayudar si se les pide. Green y Chase dijeron que algunas de las claves del éxito en una campaña de donación como esta incluyen facilitar la participación de voluntarios con vidas ocupadas y recordar que el Señor magnifica los esfuerzos sinceros.

La campaña de donación requirió mucho trabajo, con varias horas de promoción, recolección y compras, pero Applegate dijo que nunca olvidará cómo todo ese trabajo  duro valió la pena — y la ayuda que recibió. “Mientras seguía al Espíritu, el Señor me guiaba a aquellos que podían ayudarme y así lo hizo. Lo mismo ocurre con mi misión”, dijo. “Al establecer metas, necesito recordar al Señor y Su plan para mí y seguir Su plan para lograr el mejor resultado”.

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