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KnoWhy #228

¿Por qué es importante el tratado de paz que duró 10 años?

octubre 17, 2017
KnoWhy #228
Mormon and Ammaron (Mormón y Ammarón) por James Fullmer
“Y sucedió que los lamanitas no volvieron de nuevo a la batalla sino hasta después de haber transcurrido diez años más”
Mormón 3:1

El Conocimiento

Después de informar brevemente sobre 24 años continuos de guerra y maldad, Mormón dijo que los nefitas concertaron un tratado con los lamanitas en el año 350 (Mormón 2:28).1 Los términos del tratado requerían que los nefitas cedieran toda la tierra en la región del sur (v. 29), pero a cambio de eso trajo la paz por diez años completos (Mormón 3:1).

Suponiendo que el calendario nefita se reinició cuando empezaron a contar sus años desde el nacimiento de Cristo, esto habría sido el aniversario del jubileo.2 El año del jubileo fue un año sabático adicional observado al final del séptimo período sabático de siete años.3

Según Robin J. DeWitt Knauth, “El año del Jubileo… es la última etapa en la duración del principio sabático”.4 Siendo el pináculo del sistema sabático, el año del jubileo se celebraba cada cincuenta años.5 Es fácil imaginar que un pueblo que vio un significado en ciclos de calendarios de siete seguramente habría notado que este año del jubileo en el año 350 no fue cualquier jubileo–fue el séptimo jubileo desde el nacimiento de Cristo (350 siendo 7 x 50). 6

Dada la decadencia y la maldad entre los nefitas y los lamanitas, es difícil decir si la importancia simbólica de ese año fue realmente reconocida.7 Mormón, sin duda, estaba consciente, y como capitán jefe de los ejércitos nefitas, probablemente fue instrumento en la negociación de los términos y el momento del tratado.

El descanso de la tierra fue algo central tanto para la ley del jubileo en general como para este tratado en particular. El jubileo estaba destinado a ser “un año de” descanso “para la tierra”. También era un tiempo cuando “la tierra debía ser restaurada a su propietario de línea de herencia original”.8

Por lo tanto, parece significativo que en un momento en que la tierra debía ser devuelta a su propietario, gran parte de las tierras nefitas y lamanitas fueron reasignadas bajo los términos de este tratado de diez años, ya que “quedaron divididas las tierras de nuestra herencia” (Mormón 2:28). Cualquier nefita que aún celebraba el jubileo no pudo haber olvidado el significado: a los ojos del Señor, ya no eran los propietarios de ninguna tierra al sur de la estrecha lengua de tierra.

Probablemente, esta situación no era lo que Mormón hubiera esperado en un mundo ideal, aunque quizá todavía recibió con agrado el descanso del combate que proporcionaba este jubileo extendido y el tratado mismo. Mormón había tomado el mando de los ejércitos nefitas en su adolescencia (Mormón 2:2). Ya tenía 40 años y seguía en la batalla después de pasar la mayor parte de su vida en guerra. En algún lugar en medio de la guerra y la maldad, Mormón debe haber encontrado tiempo para casarse y tener un hijo, Moroni. A medida que se aproximaba el año 350, probablemente estaba ansioso de celebrar la temporada del jubileo en paz con su familia y otros seguidores justos.

El prolongado período de paz también le proporcionó otras oportunidades. Para algunos, Mormón aprovechó el tiempo para predicar el arrepentimiento al pueblo, pero fue en vano (Mormón 3:2-3). Probablemente durante este tiempo, Mormón escribió su epístola sobre la fe, la esperanza y la caridad (Moroni 7), y también hizo la mayor parte de su trabajo en el registro nefita, explorando el vasto archivo histórico el cual se le había confiado, formulando la narrativa que quería contar, y resumiendo y condensando ese material que es el Libro de Mormón.

Moroni era probablemente un adolescente durante este tiempo de paz, trabajando bajo su padre como aprendiz, aprendiendo la historia de su gente, y preparándose para su papel como el último guardián compendiador del registro nefita. Dado que Mormón estaba ocupado al mando de los ejércitos antes del tratado, y Mormón y Moroni se volverían a enrolar en la guerra después de la vigencia del tratado de paz, estos eran probablemente importantes años de formación para Moroni.

El Porqué

Este tratado de diez años es un detalle sutil, considerando cuan fácilmente Mormón omitió esos años. Un lector común del Libro de Mormón puede sentirse fácilmente abrumado por los horribles relatos de la guerra y preguntarse cómo Mormón, el capitán militar principal, habría tenido tiempo de escribir un registro tan extenso de la historia de su pueblo.

El tratado proporcionó una ventana importante, quizás esencial, de oportunidad para que Mormón se concentrara en su registro. Dada la importancia del Libro de Mormón de inspirar a millones a venir a Cristo, el Señor mismo pudo haber sido fundamental en la realización de este período vital de paz.

El tratado era también un testamento del bien que los líderes justos pueden hacer, incluso en tiempos de iniquidad. Como capitán del ejército, Mormón logró traer la paz a su pueblo durante diez años completos, y en una importante coyuntura de su historia, es decir, el séptimo jubileo desde la venida de Cristo. Aunque el pueblo al final desaprovechó la oportunidad de arrepentirse en este período de paz que les fue permitido, sería un error descartarlo como un fracaso.

Aunque la paz no duró, ante la guerra perpetua y la aniquilación total, lograr una década completa de paz fue un logro importante. Sin duda sirvió como una bendición que fortaleció al pueblo de Mormón. Los esfuerzos de los líderes Mormones y potencialmente otros nefitas justos involucrados en las negociaciones no deben ser rebajados, ya que dan énfasis a la importancia incesante de elegir líderes rectos.

La sincronización—en el séptimo año del jubileo—también fue significativo. El año del jubileo fue un tiempo de paz, descanso, prosperidad, perdón y bendiciones. 9 Para su último jubileo antes de su completa destrucción, a los nefitas se les concedió un prolongado período de paz. Sin embargo, esa paz llegó a costa de todo su territorio en la tierra hacia el sur. La pérdida de la tierra en un momento en que la tierra debe ser redimida debe servir como una advertencia poderosa para los lectores modernos: al igual que los nefitas perdieron su tierra, así pueden las naciones poderosas de hoy caer si se alejan de Dios y sucumben al mal.

Tal vez lo más impresionante fue que, el tratado era también prueba de la misericordia del Señor. A pesar de la maldad de los nefitas y su destino profético de la destrucción acercándose, no era demasiado tarde para que cambiaran de rumbo. En este año especial del jubileo, el Señor “los había librado, y les había concedido una oportunidad para arrepentirse” (Mormón 3:3) y así obtener el perdón.

Desafortunadamente, “el pueblo no reconoció que el período de paz que habían experimentado había llegado a ellos… como una bendición misericordiosa de Dios para darles la oportunidad de arrepentirse”.10 Hoy, aun cuando el mundo se desvía más de las normas del Señor, la oportunidad de que los individuos y la sociedad en conjunto se arrepientan y cambien de rumbo no se ha perdido, pero el tiempo puede ser cada vez más corto.

Otras Lecturas

Book of Mormon Central en Español, “¿Por qué Alma quería hablar ‘con la trompeta de Dios’? (Alma 29:1)”, KnoWhy 136 (Junio 15, 2017).

John W. Welch and J. Gregory Welch, “Benjamin’s Themes Related to Sabbatical and Jubilee Years,” en Charting the Book of Mormon: Visual Aids for Personal Study and Teaching (Provo, UT: FARMS, 1999), chart 91.

Terrence L. Szink y John W. Welch, “King Benjamin’s Speech in the Context of Ancient Israelite Festivals,” en King Benjamin’s Speech: “That Ye May Learn Wisdom, ed. John W. Welch y Stephen D. Ricks (Provo, UT: FARMS, 1998), 193–199.

 

1. Véase Book of Mormon Central en Español, “¿Por qué Mormón escribió muy poco acerca de su propio periodo de tiempo? (Mormón 2:18)“, KnoWhy 227 (octubre 16, 2017).
2. Para un estudio del Jubileo en el Libro de Mormón, véase Book of Mormon Central en Español, “¿Por qué Alma quería hablar ‘con la trompeta de Dios’? (Alma 29:1)”, KnoWhy 136 (Junio 15, 2017).
3. Véase Robin J. DeWitt Knauth, “Sabbatical Year”, en Eerdmans Dictionary of the Bible , ed. David Noel Freedman (Grand Rapids, MI: Wm. B. Eerdmans, 2003), 1147.
4. Robin J. DeWitt Knauth, “Jubilee, Year of,” en Eerdmans Dictionary, 743.
5. Knauth, “Jubilee, Year of”, 743 describe el Jubileo como el “año 50 en una serie de siete años Sabáticos”. Sin embargo, existe cierta ambigüedad en cuanto a si el jubileo era el 49º año (el séptimo año sabático) o el 50º. Christopher J. H. Wright, “Jubilee, Year of,” en Anchor Bible Dictionary, ed. David Noel Freedman, 6 vols. (New Haven, CT: Yale University Press, 1992), 3: 1025, explicó: “Lev 25:8-10 lo especifica como el año 50, aunque algunos eruditos creen que puede haber sido en realidad el 49º–es decir, el séptimo año Sabático”. Terrence L. Szink y John W. Welch, “King Benjamin’s Speech in the Context of Ancient Israelite Festivals,” en King Benjamin’s Speech: “That Ye May Learn Wisdom, ed. John W. Welch y Stephen D. Ricks (Provo, UT: FARMS, 1998), 222 n.162 analizaron: “El modo inclusivo de contar a veces el último año como el primero del siguiente ciclo del jubileo explica la frecuente confusión entre el conteo para el año 49 y 50 del Jubileo”.
6. Puede haber evidencia de algo similar que sucedió en Qumrán en los Rollos del Mar Muerto. Los pergaminos de los Signos del Calendario (Otot; 4Q319) documentan un ciclo de 294 años de 6 jubileos (de 49 años cada uno), correlacionados con un ciclo sacerdotal separado de 6 años. Véase Geza Vermes, trans., The Complete Dead Sea Scrolls in English, edición revisada (Nueva York, NY: Penguin Books, 2004), 365. Según Roger T. Beckwith, Calendar and Chronology, Jewish and Christian (Boston, MA: Brill, 2001), 92, “en algunos manuscritos se extendió a siete jubileos”. 4Q319 menciona “[Las señales del] séptimo [Jubileo]”. (Vermes, Complete Dead Sea Scrolls, 369.)
7. Aunque pocos pudieron haber sabido del significado, el jubileo pudo haber sido celebrado extensamente como tradición cultural, así como la navidad hoy es a menudo celebrada no solo por los cristianos que conmemoran el nacimiento de Cristo, sino también por otros que lo ven típicamente como un tiempo para estar con la familia y dar regalos.
8. Knauth, “Jubilee, Year of,” 743.
9. Para los temas del año del jubileo, véase John W. Welch and J. Gregory Welch, “Benjamin’s Themes Related to Sabbatical and Jubilee Years,” en Charting the Book of Mormon: Visual Aids for Personal Study and Teaching (Provo, UT: FARMS, 1999), chart 91.
10. Joseph Fielding McConkie, Robert L. Millet, y Brent L. Top, Doctrinal Commentary on the Book of Mormon, 4 vols. (Salt Lake City, UT: Deseret Book, 1987–1992), 4:222.

Traducido por Central del Libro de Mormón